YO SOMBRIO.
Ya solo soy la sombra de tu ausencia,
una oscura mitad que se acostumbra;
maduro a tu rigor.
Sorda existencia.
Desmayado vivir.
Ciega obediencia que el recuerdo de tu voz alumbra.
Pupila fiel; ojo que solo ve tu cielo. ¡Ángel caído a tus ordenes!
Desterrado de asombros y colores
beso mi cicatriz. Me aclimato al olvido que padezco.
Y a los agudos garfios heridores que inútil, resisto.
T.S.
Comentarios
Publicar un comentario